Lo que para algunos es una comparación absurda, para otros nos parece además de absurda: divertida.
En Tam Vanum Noticias estamos abiertos a la pluralidad, y la diversidad de gustos no solo nos parece natural sino indispensable. Todo mundo tiene derecho a elegir cómo divertirse y siempre es mejor hacerlo de manera sana.
Por eso, incluso suena interesante que el Carnaval Cancún 2020 sea el primero que implementa "Basura cero" en México.
Y sobre la cero-basura se puede ir insertando una comparación, que aunque se trate de dos asuntos de diferentes dimensiones, son a su vez un tanto sencillas de medir "proporcionalmente" hablando: los eventos masivos (populares por sus artistas famosos invitados) VS los eventos culturales con artistas locales.
Es obvio que el interés de la gente aumenta cuando hay una logística y organización bien hechas, y cuando se presentan artistas famosos en escenarios puestos para que la gente se divierta observando y gozando de manera gratuita en un entorno familiar y de fiesta.
Pero si un evento no se pretende «masivo», eso no es excusa ni motivo para que la logística y la organización sean subestimadas. Es hasta lógico, que si se organiza un evento para «difusión» de artistas emergentes o con cierta trayectoria pero local, deba hacerse tal organización con mucha precisión y enfoque.
Es aquí donde entra la comparación "proporcionalmente" hablando: si un artista local, escritor o cual sea creativo, con "cierta trayectoria", se presenta gratis, ¿no debería tener mínimo, qué será, unos cinco o tres seguidores asistiendo exclusivamente a verlo?
Pues no. No va, a veces ni un solo asistente. Pero... cuando ni al propio artista le interesa difundir su obra, ¿para qué iría la gente a perder el tiempo habiendo cosas más entretenidas? Literalmente, ni siquiera los mismos artistas locales asisten a los eventos a los que son convocados.
¿Cuáles son las múltiples causas de este fenómeno de indiferencia absoluta y resignación y costumbre? Las respuestas se las dejamos de tarea.
![]() |
Imagen tomada del portal MVS (link de noticia) |
Mientras tanto, no nos sorprende que al Carnaval 2020 asistan 100 mil personas y a un evento literario que anuncia seis escritores no vayan ni siquiera los seis escritores y solo vayan tres y un solo asistente, además de la acompañante de un escritor, y del organizador, y del acompañante del un-asistente, y un amigo del organizador... ¡Wow! ¡Suman ocho personas!
Tal situación sin embargo, no es nueva y ya a nadie nos sorprende que se sigan creando eventos raquíticos y desapercibidos, en lo que, siendo sinceros y objetivos, el valor de lo expuesto en dichas celebraciones es indiscutible. Pero, por eso mismo, es más lamentable que nadie lo aproveche.
¿Qué opinas de este tema?
¿Qué opinas de este tema?
2 Comentarios
Creo que es lógico , en una comunidad como la nuestra, que la diversión sea más atractiva que el arte, sobre todo cuando esté último suele distorsionarse en dos extremos: el egocentrismo del artista y su incapacidad de representar algo más allá de si mismo; o la falta de calidad artística (que incluye superficialidad o rebuscamuento para ocultar su vacío).
ResponderBorrarCómo dices, tenemos que cuestionar nuestras propias estrategias y propuestas y reconocer también que aún es complejo pretender convertir el arte en un fenómeno de masas.
Puesíes lógico, peroyo memiro enel espejo y me siento estúpido, ilógico...
ResponderBorrar